9 de feb. de 2012

Vergüenza


Hay noticias que -aunque las esperes- no dejan de sorprenderte. Y no por lo inesperado sino por lo vergonzoso. Que Baltasar Garzón sea inhabilitado en su cargo por “laminar el derecho de defensa de los imputados en el caso Gürtel“, mientras Ricardo Costa y Francisco Camps son absueltos “gracias a Dios”, es un ataque directo a nuestra dignidad, además de traernos la preocupante percepción de que los tribunales españoles se encuentran al servicio de la corrupción.

Es de Justicia, cuando menos, no olvidar para el futuro los nombres de los magistrados que, por unanimidad firmaron la sentencia. El tribunal estuvo presidido por Joaquín Giménez, y contaba, además de con el ponente Colmenero, con los  magistrados Andrés Martínez Arrieta, Francisco Monterde, Juan Manuel Berdugo, Manuel Marchena -instructor del caso de los cobros de Nueva York- y Luciano Varela -instructor de la causa contra Garzón por investigar los crímenes del franquismo-.

Hace unos días una foto de una cantante francesa en las redes sociales, me hacía recordar aquella Declaración de los derechos del hombre que los jacobinos redactaban en Francia en 1793; más concretamente el artículo 35, que decía: Cuando el gobierno viola los derechos del pueblo, la insurrección es, para todo éste y para cada porción, el más sagrado de los derechos y el más indispensable de los deberes.

Pues eso, aguantará la situación hasta su irreversibilidad o explotará antes?

2 comentarios:

  1. Nestes intres de carraxe e tristura quero lembrar estes versos de Claudio Rodríguez
    onde nos lembra "que estamos en derrota, nunca en doma":

    "Déjame que te hable en esta hora
    de dolor con alegres
    palabras. Ya se sabe
    que el escorpión, la sanguijuela, el piojo,
    curan a veces. Pero tú oye, déjame
    decirte que, a pesar
    de tanta vida deplorable, sí,
    a pesar y aun ahora
    que estamos en derrota, nunca en doma,
    el dolor es la nube,
    la alegría, el espacio,
    el dolor es el huésped;
    la alegría, la casa.(...)"

    Lo que no es sueño.
    Claudio Rodríguez.

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  2. Mui ben traídos os versos, Valente, mui ben traídos

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